-Aaa...
-Decide! No seas cobarde!
Morphang estaba confuso, y a la bestia eso no le gustaba nada: cada segundo que Morphang pasaba inmóvil, la bestia se impacientaba más y más.
-De una buena vez!
-Basta!
De un rápido movimiento, Morphang sujeto al niño por la chaqueta y, dejando la espada de la sombra en el piso, empuño la suya propia apuntando al ojo rojo del infante: el no era ese niño.
*shunkt*
-AYRRRGHHH!!! PERO QUE HAS HECHO!
Grito la bestia de furia y dolor mientras se llevaba las manos a su ojo carmesí.
-Idiota! Inútil! Así no era como tenía que ser!
Acto seguido, recogio su propia espada cuya hoja habia tomado un color rubí por la sangre derramada. El niño en el suelo, muerto, comenzó a descomponerse rapidamente. La niebla se volvio tan espesa que Morphang comenzó a sentir un mareo insoportable.
Alcanzó a reponerse justo a tiempo para bloquear un ataque que le hubiera costado la cabeza. Con una rapidez inaudita, la bestia aullaba ferozmente mientras atacaba ferozmente a Morphang, quien solo podía limitarse a bloquear cada uno de los ataques.
-Quien eres?
-ESO MISMO DEBERIA PREGUNTARTE A TI! Así no es como tenia que haber sucedido esto! Solo tenias una estupida cosa que hacer: matar a la niña! Hijo de perra, el niño era la única conexión que teniamos! Quien rechaza el máximo poder al tenerlo al alcanze de la mano?!
VOY A REBANARTE EL PESCUEZO, DESGARRARE TU CUERPO MALDITO Y ACABARE CON TU MISERABLE VIDA!
Cada choque entre las espadas lanzaban chispas rojas que iluminaban el bosque. Morphang bloqueaba uno tras otro los ataques de el espectro, lo cual no hacía más que alimentar la ira que este tenía.
De repente, Morphang reconocio los ataques: más rápidos sí, talves más fuertes, pero eran sus propios golpes! La bestia sujetaba la empuñadura de la misma forma que Morphang, y el hecho que la espada fuera igual a la suya hizo que comprendiera: ninguno de los 2 eran una sombra. Ambos eran la misma persona, y si tenia que matarlo...
-Urgk! (Rayos, de todos los momentos para pensar en todo lo que esta pasando, tenía que ser este.) Ughh... aire!
-Qué? Crees que voy a tener piedad de ti ahora?- le dijo la bestia mientras aprisionaba la garganta de Morphang con sus manos- No mereces nada de lo que la vida te ha dado, porque debo dejar que un regalo tras otro se desperdicie en ti cuando los 2 podiamos haber obtenido provecho de ello? Si no puedo unirme a ti para recuperar lo que he perdido, entonces tu mereces quedar como yo: perder todo lo que tenias: que tal si comenzamos con el don de la vida?
Entonces...
-Entonces? Qué paso abuelo?
-Rayos, parece que en la última migración se quemaron las últimas páginas de mi libro. Mi padre me lo dio antes de ir a defender la caravana, y me prometio que volveria para terminar de contarme la historia, pero los worgen acabaron con su vida. Esas bestias dementes y viles...
-Pues nosotros podemos ponerle un fin, no? Yo estoy segura que Morphang acabo con el monstruo! Siempre es en esta parte en la que el héroe sale vencedor!
-Siempre eres tan alegre... duerme ya pequeña.
-Abu! Yo sere algun día como Morphang! Sere la guerrera más grande que la Alianza jamás haya visto, y siempre protegere a ti, a papá, y a mis amigos! Cumplire mi sueño por todos!
-Jeje... Es un buen sueño. Pero la pequeña guerrera ya tiene que acostarse. Ya estarde.
-Aaaaa, venga ya!
-A dormir.
-Esta bien. Buenas noches abuelo!
-Buenas noches... Millicent
Gracias al staff de BdM por publicar esta historia en la sección literaria.
Todo lo relacionado a World of Warcraft pertenece a Blizzard -Excepto los personajes. En teoría son mios, no?-
Cuéntame tu historia es la sección literaria de Buscadores de Mazmorras.
Se publican historias todos los lunes, con Mashka como editora -de la
imagen que acompañe el texto, no del texto- y principal directora.
No hay comentarios:
Publicar un comentario